Los ingleses, en guerra con la República francesa, se sintieron espoleados por la noticia del telégrafo de Chappe a establecer sus telégrafos entre Londres y los puertos del Canal de la Mancha (necesidad que ya venían denunciando los responsables de su Marina desde unos años antes) y en 1794, es decir, en las mismas fechas que Chappe lo hacía en París y Lille, ponían en servicio su propio modelo.

 


Como puede verse en la figura, el sistema inglés, debido a George Murray, no tiene ninguna semejanza con el francés y presenta un aire más estático que aquél. En la figura se representan varias de las posibles combinaciones que pueden obtenerse.



Consiste en un gran panel, dividido en seis sectores, que pueden moverse de forma que se presenten de plano o de perfil a la vista del observador lejano. El número posible de combinaciones que permite el panel es de 64, y se utilizaban de forma alfabética y también mediante diccionarios de expresiones cifradas.

La primera línea fue la establecida entre Londres y Deal y, más adelante, fueron estableciéndose otras desde Londres a Portsmouth, Plymouth y otros puertos. Algunas de estas líneas se mantuvieron hasta 1814.

 

 

Los demás países de Europa y los Estados Unidos de Norteamérica tuvieron rápida noticia de estos experimentos franceses e ingleses y muchos de ellos fueron poniendo en servicio sus propios sistemas telegráficos.

Algunos grabados de esos modelos podeis verlos a continuación.